La idea es conocer y aprender el pasado que está desconectado del presente. Debemos conocer el pasado e ir más allá. Sin embargo, nos quedamos ahi, simplemente en conocerlo. No construimos sobre ello. No incluimos ese saber en nuestro presente y entonces acabamos perdiéndolo.
La artista explora ese sentimiento de pérdida de sentido de las palabras, a partir del cual su práctica se convierte en un proceso de investigación del lenguaje, de su forma y su sentido. Como ya hizo al principio de su carrera a través del video y de la fotografía, Nicène se aparta el ritmo frenético en el que nos encontramos inmersos y que nos lleva a perdernos parte de las cosas que suceden en el tiempo, para priorizar la lentitud y la paciencia y la concentración. Invita al espectador a pararse, acercarse, dejar de lado cualquier otra actividad o pensamiento, y centrarse únicamente en su obra, en intentar descifrarla.
A diferencia de las obras en papel, Kossentini extrae textos sobre la gramática de la lengua árabe de un viejo libro escolar de su padre, y los escribe sobre cristal. Con parte de los fragmentos superpuestos entre sí, se pueden percibir algunas palabras que destacan, pareciendo unas partes más accesibles que otras. Sin embargo, tras un rato frente a la obra, tras tomarse un tiempo para descifrar el contenido, el espectador comprende que no es posible. Con este gesto, la artista reflexiona si el lenguaje es realmente suficiente para la formación del conocimiento.
Utilizamos la escritura y la caligrafía árabe como arte conceptual por excelencia, con esa idea de ser único, de ser cósmico; nos expresamos a través de la forma de la escritura árabe, y creo que en la actualidad debemos seguir con esta forma de expresión.
No llores por las ruinas y por el amado si te deja
Abu Nuwâs ( Irán, 756 - 814)
Al principio de mi carrera me pregunté: ¿cuáles son mis referencias? ¿Qué es lo que amas del arte? Y siempre respondía “la poesía árabe”. No soy poeta, no soy escritora, pero dentro de mi propia cultura, como hay ausencia de imágenes, nos han “bañado” en letras, en poesía y literatura.
Nicène activa nuestra capacidad de ahondar detrás de la superficie, especialmente porque la mayoría de sus piezas parten de una clara temporalidad, en un único espacio-tiempo continuo. Flotando como eterna, ligera e intensa a la vez, sus creaciones minimalistas apuntan a lo esencial y tratan de captar lo que huye, cambia o desaparece. Pero, ¿podemos captar el movimiento?
Clelia Coussonnet
En estos fragmentos hay una construcción de un nuevo paisaje. Es un paisaje que se forma a través del conocimiento.
El pensamiento de la línea, su ausencia en la presencia, han invadido todo; pasado de una escritura-recuerdo ilegible y presente de un paisaje flotante, indeciso. Una nada sobre nada que se convierte en todo.
Christine Buci-Glucksman , filósofa y crítica de arte.
Todos los nombres de mis compañeros que en su momento aprendieron y se formaron, que grabaron su identidad en los pupitres, ahora se han convertido en personas adultas, que determinan el futuro de una civilización, de una sociedad.
The School Desk, 2020.
Escritorio antiguo con grabados.
115,9 x 82,4 cm
Solicitar información sobre esta obraNicène Kossentini
Nicène Kossentini ( 1976, Túnez) se formó como artista en la Academia de Bellas Artes de Túnez, en la Universidad Marc Bloch de Estrasburgo y en la Universidad de la Sorbona en París. Durante la primera edición de los International Digital Media en Francia, fue residente en el Estudio Nacional de Arte Contemporáneo Le Fresnoy y en l'École de l'Image Les Gobelins. Actualmente, es profesora de cine experimental en la Universidad de Túnez.
Las obras de Nicène se han expuesto en todo el mundo en galerías de arte e instituciones como Institut du Monde Arabe (Francia), MUSAC (España), Centro Atlántico de Arte Contemporáneo (España), Círculo de Bellas Artes (España), Museo de Boulogne Billancourt (Francia), Museo Nacional de Cartago (Túnez), Museo de Arte Contemporáneo de Argel (Argelia), Bienal de Bamako, Bienal de Alejandría (Túnez) y la Bienal de Thessaloniki (Grecia).
Su obra está presente en destacadas colecciones públicas como el British Museum (Inglaterra), la Fundación Kamel Lazaar o el Museo de Arte Moderno (Túnez).